Chanés: Ocupaban el Chaco Occidental. Eran cazadores, pescadores y agricultores incipientes de maíz, algodón y porotos. Hilaban algodón y se destacaron como ceramistas. Junto a los Chiriguanos eran de origen selvático y provenían de la Amaconia. Los Chané que siguen hoy practicando la artesanía tradicional, especialmente la confección de máscaras, son poco más de mil, y viven en Salta, al igual que los Chiriguanos.
Guaraníes: Asentados sobre los ríos, en las actuales provincias de Misiones y Corrientes, eran cazadores, pescadores y agricultores de batata, mandioca, maíz y porotos; fueron hábiles canoeros. Las aldeas eran rodeadas por empalizadas, características defensiva típica de la selva amazónica. Tenían fuertes cacicazgos y una cosmovisión muy rica. Sus descendientes, a los que se sumaron en tiempos recientes grupos Mbeyá de Paraguay, viven actualmente en la selva misionera.
Tobas: Ocupaban la región del Chaco Oriental, integrando la familia lingüística guaycurú. Eran nómades, cazadores de venados, avestruces, pecaríes, tapires, tatúes e iguanas; también fueron recolectores. Lucharon duramente junto a los abipones y fueron derrotados por el ejército ya bien avanzado el pasado siglo. Son una de las etnias más numerosas y viven en Chaco, Formosa, Salta, Santa Fe y zonas urbanas. Además de otras prácticas tradicionales mantienen su trabajo en artesanías, especialmente en cestería, tejido y cerámica.
Wichís: Habitaban el Chaco Central. Vivian de la caza y la pesca. En su organización social tenían un lugar destacado los Consejos de Ancianos y los chamanes. Gran cantidad de espíritus de la naturaleza regulaban la relación de los Wichí con ella. Vestían prendas realizadas con fibras de una planta llamada chaguar, sus diseños imitaban motivos de la naturaleza.
Hoy viven en Salta, Formosa y Chaco en gran número, manteniendo en sus comunidades la forma de vida tradicional. Son destacados artesanos en tallas de palo santo, tejidos y cerámica.
Hoy viven en Salta, Formosa y Chaco en gran número, manteniendo en sus comunidades la forma de vida tradicional. Son destacados artesanos en tallas de palo santo, tejidos y cerámica.
Mapuches: Pueblo amerindio de la familia lingüística araucana, cuyos habitantes actualmente viven en Chile y Argentina.
Su origen arqueológico-migratorio está aún por establecerse; sus vestigios más antiguos datan del 500 a.C. y no está demostrado si provienen del centro de Sudamérica, del Chaco y de las
Pampas o de algún otro lugar. En 1546 se produce en Quilacura la primera batalla contra los conquistadores españoles. Antes de su llegada los mapuches eran un millón de personas. En 1859, se produce un alzamiento general que origina la definitiva campaña del coronel argentino Cornelio Saavedra contra este pueblo (1860-1883). El territorio mapuche es desmembrado y la propiedad de la tierra pasa al Estado, quien entre 1884 y 1919 distribuye 475.000 ha en 3.000 'títulos de merced' a unos 78.000 mapuches: tal es la base de la actual situación.
En la actualidad los mapuches tratan de recuperar sus tierras agrupándose en organizaciones indígenas herederas de otras muchas, como fueron, por ejemplo, la Sociedad Caupolicán (1910), la Sociedad Mapuche de Protección Mutua-Federación Araucana (1916), la Nueva Sociedad Lautaro (1958) o la Confederación de Sociedades Mapuches (1968). Se calcula que hoy viven unos 900.000 en Chile y 150.000 en Argentina.
Pampas o de algún otro lugar. En 1546 se produce en Quilacura la primera batalla contra los conquistadores españoles. Antes de su llegada los mapuches eran un millón de personas. En 1859, se produce un alzamiento general que origina la definitiva campaña del coronel argentino Cornelio Saavedra contra este pueblo (1860-1883). El territorio mapuche es desmembrado y la propiedad de la tierra pasa al Estado, quien entre 1884 y 1919 distribuye 475.000 ha en 3.000 'títulos de merced' a unos 78.000 mapuches: tal es la base de la actual situación.
En la actualidad los mapuches tratan de recuperar sus tierras agrupándose en organizaciones indígenas herederas de otras muchas, como fueron, por ejemplo, la Sociedad Caupolicán (1910), la Sociedad Mapuche de Protección Mutua-Federación Araucana (1916), la Nueva Sociedad Lautaro (1958) o la Confederación de Sociedades Mapuches (1968). Se calcula que hoy viven unos 900.000 en Chile y 150.000 en Argentina.
Tehuelches: Poblaban gran parte de la Pampa y la Patagonia. Eran de una gran contextura física. Eran cazadores nómades de guanacos, ñandúes, liebres y zorros. Conservaban la carne secándola al sol. La misión de los caciques era dirigir las cacerías y organizar los traslados de las "tolderías". Gran parte de los Tehuelches se mestizaron con los Mapuches y el resto desapareció por los enfrentamientos con el Ejército durante el siglo pasado. Hoy quedan unos pocos centenares en la provincia de Santa Cruz y mestizos en distintos puntos del país.
Kollas: Esta etnia es reciente y juntos con mapuches, tobas, chiriguanos y wichi una de las más numerosas. Habitan especialmente en la región de la Puna, en las provincias de Salta, Jujuy y Catamarca. Son los descendientes de las comunidades originarias del Noroeste y de inmigraciones más recientes de pobladores quechuas y aymarás. Viven de la agricultura, alfalfa, papa, maíz y del pastoreo de ovejas, cabras y llamas. Visten con tejidos de lana realizados en telar. Rinden culto a la Pacha Mama (Madre Tierra). Celebran en nuestros días un gran número de ceremonias en las cuales se integran elementos de origen indígena con el catolicismo. Muchos kollas se encuentran hoy en las grandes ciudades.
Yamanas: Habitaban los canales fueguinos y vivían de la caza y la pesca. Eran canoeros; transcurrían casi la mitad de sus vidas embarcados.
Hacia la primera década de este siglo se extinguieron, a consecuencia de las matanzas a manos de los "loberos", los "ejercicios de tiro" de los navegantes extranjeros y las epidemias por contacto con los blancos.
Hacia la primera década de este siglo se extinguieron, a consecuencia de las matanzas a manos de los "loberos", los "ejercicios de tiro" de los navegantes extranjeros y las epidemias por contacto con los blancos.
Huarpes: Habitaban parte de los actuales territorios de Mendoza, San Juan y San Luis. Los que estaban cerca de la cordillera eran agricultores sedentarios de maíz y quínoa; los ubicados más al este eran cazadores de liebres, guanacos, ñandúes, y vizcachas; finalmente estaban los huarpes "laguneros", de Guanacache, básicamente cazadores y pescadores desde balsas de totoras. Vestían tejidos realizados en telar. Con la conquista y colonización se fueron mestizando hasta desaparecer como etnia, aunque recientemente se han hecho presente descendientes de la población originaria.
Diaguitas: Habitaban los Valles Calchaquíes, en el noroeste. Vivian en grandes concentraciones urbanas, regidas por fuertes jefaturas. Sus cultivos principales eran el maíz, zapallo y porotos. Poseían importantes obras de riego artificial y almacenaban los alimentos. Fueron criadores de llamas y recolectores de chañar y algarroba. Poseían avanzados conocimientos de medicina y astronomía. El arte diaguita, en cerámica y metalurgia, es el más destacado de nuestras culturas indígenas. Adoraban a la Madre Tierra, y a diversas deidades de la naturaleza. Opusieron una de las más enconadas resistencias al conquistador español. Sus descendientes viven hoy en Tucumán y Catamarca.
Abipones: Junto con tobas y mocovies, pertenecian a la gran familia lingüistica guaykurú de la región chaqueña, conocidos como "los frentones" dada la manera de rasurarse el cabello hasta la mitad de la cabeza. Cazadores de avestruces, tapires, venados, pecaríes y tatúes; recolectores de hierbas y frutos, se asentaron en la ribera norte del río Bermejo inferior. Realizaban complejos tatuajes en sus cuerpos que iban completando a lo largo de su vida. En el caso de las mujeres se hacían en ocasión de los rituales de iniciación, cubriendo todo el rostro con diseños sumamente elaborados. Hábiles guerreros, resistieron hasta el final del siglo pasado, cuando las campañas militares exterminaron a sus últimos representantes.
Selk'nam: Conocidos también como Onas, habitaban en Tierra del Fuego. Eran cazadores nómades de guanacos, patos y cisnes, también fueron recolectores de frutas y raíces. Pintaban su cuerpo con series de rayas y puntos de manera sumamente estética para sus rituales de iniciación o en ocación de las ceremonias de las "sociadades secretas de varones" para aterrorizar a las mujeres. Vestían con mantos de pieles de zorro y otros animales de la zona. La autoridad recaía en ancianos y chamanes. Hoy quedan algunos pocos descendientes. Prácticamente desaparecieron a principios de este siglo por las matanzas de los colonos y las epidemias.